WORLD OF INTERIORS 2010
World of Interiors is a performance-installation with people lying on the floor, eyes closed, rather motionless.
The 15 performers are whispering the angry and poetic words of the playwright Rodrigo Garcia. The audience has to approach the performers bodies to understand what they are saying. "World of Interiors" explores the border / relationship between spectators and the piece; it seeks to integrate the audience into the time and space of the performance and to identify the tensions between art and the codes that govern society. In this installation/performance, the spectator can enter and leave the performance space at will. He or she has the liberty to define how long to remain inside, whether to stay with one performer or move on to another one. Each performer has a different collage of texts to say. There is a score for the texts. They are part of a collective partition, with moments of silences, chorus and cannons.

"World of Interiors emerges out of Ana Borralho and João Galante’s unique parcours in the world of performing arts. Over the years the two artists have developed their research into a consistent and mature body of work; always hybrid, it traverses the boundaries of visual and performing arts." in Alkantara Festival 2010 program

Concept, Artistic direction, Light and Set design Ana Borralho & João Galante
Text fragments of the theater writings of Rodrigo Garcia
Translation and dramaturgic collaboration Tiago Rodrigues
Performers (Lisbon-Portugal) Ainhoa Vidal, Alina Bilokon, Antonia Buresi, André Duarte, Célia Jorge, Chris Scherer, Elisabete Fradique, Laurinda Chiungue, Luís Godinho, Maria Manuel Marques, Pedro Frutuoso, Pietro Romani, Renata Portas, Ricardo Barbosa, Rui de Sousa
Artistic consultancy Fernando Ribeiro
Executive production Ana Borralho, Mónica Samões, Miriam Vale
Production casaBranca
Co-production alkantara festival, Museu Colecção Berardo, Útero - Associação Teatral / Espaço Land, CNDC - Centre National de Danse Contemporaine Angers
Artistic residency Centre National de Danse Contemporaine Angers / França
Support Atelier Re.Al, IEFP, Grande Cena, TNT- Manufacture de Chaussures, Bordeaux / França
Thanks Rodrigo Garcia, Mateo Feijó, Carlos Marquerie, Alexia Larrarté, Atelier Re.Al, Pedro Joel, Nec - Núcleo de Experimentação Coreográfica, Margarida Marecos, Walter Lauterer, Flávio Rodrigues, Lara Pires, Ana Margarida Carvalho, Roman Perona, Rui Dâmaso
Support for the presentation in Lisboa Départs, Culture Programme of the European Union
casaBranca is a structure funded by Ministério da Cultura / Direcção-Geral das Artes
video credits from live performance in Lisbon Helena Inverno and Verónica Castro (Volante)
photo credits Vasco Célio
performance duration: 2 hours
Echoes of an anonymous shadow by Fernando L. Ribeiro
ABOUT WORLD OF INTERIORS
Taking its title from an interior decorating magazine, “World of Interiors” turns this reference inside out by suppressing any vestige of a décor that might encourage the autonomy of its users. Human presence is communicated by successive dislocations of body and voice and is passed orally from sender to receiver. Complete understanding requires an interminable de-multiplication of muted words that the receiver perceives as subliminal echoes of his conscience. Just as space is filled with voices that are strange to its bearers – prosthetic and inanimate bodies – our consciousness is put into action through ventriloquism, inherent to citizens who make use of anonymity as a system of camouflage. The fairy-like qualities of verbal discourse do not match the somber neutrality of the body and, in this way, the intensity of the Other voice, interior, that to the exterior world materializes as a suspicious shadow about to be definitively silenced.
Escuchar/recordar: World of interiors, de Ana Borralho y Joao Galante por Óscar Cornago

La palabra colectiva abre un espacio interior y al mismo tiempo compartido donde lo íntimo se desliga del ámbito del individuo para recuperar un terreno común. Ya desde el título, World of interiors, de Ana Borralho y João Galante, hace alusión a este mundo generado a través de la escucha. A pesar de la importancia simbólica de la mirada en la cultura occidental, la escucha es uno de los sentidos fundamentales en un medio como el teatro atravesado por la palabra. En este caso la escucha está intervenida para hacer de ella una acción colectiva. Esta acción se traduce en un paisaje sonoro que produce cierta extrañeza. Los intérpretes, entre 10 y 15, están tumbados boca arriba, dispersos en una sala amplia y diáfana, con los ojos cerrados, susurrando textos de Rodrigo García. En el festival Escena Contemporánea de Madrid, en el 2012, la obra se realizó a lo largo de dos horas. Durante este tiempo el público deambula entre los intérpretes tendidos en el suelo, pueden acercarse a uno u otro, sentarse o tumbarse, entrar en contacto físico o mantenerse al margen observando un paisaje en movimiento.

La primera impresión del espectador al acceder a la sala es de desconcierto. Cuerpos tumbados, un cierto murmullo de fondo cuya procedencia no llega a identificarse, y grupos de personas que desde lejos se confunden con los intérpretes. Como se lee en la presentación de la obra en el centro cultural Matadero de Madrid:

En World of interiors el público es confrontado de entrada con una imagen inquietante: personas tumbadas en el suelo, con los ojos cerrados, sin movimiento evidente. Aparentemente no sucede nada, pero este vacío contiene una invitación a la proximidad, a la acción. Al aproximarnos oímos textos susurrados en la tenue frontera de la intimidad de los cuerpos. El espectador escoge el modo y tiempo de escucha, el grado de proximidad, el modo de estar.[1]

La ausencia de un punto fijo en el que centrar la mirada y la mezcla de los murmullos sobre el silencio de fondo hace que crezca un estado de dispersión en el que el espectador, con su deambular, es un elemento más. La obra no son los actores diciendo unos textos, sino la situación a la que dan lugar, de la que forma parte el público.

Esta especie de instalación humana pone de relieve la dimensión sensible del acto mismo de la escucha. No se escuchan solo los textos de Rodrigo García, que según donde se sitúe el espectador ni siquiera llegan a oírse, y que en algunos casos son dichos en distintos idiomas, sino también a quien los dice, el cómo se dicen, la situación que se forma, y finalmente a nosotros mismos en el acto de escuchar. El modo de decir los textos es el elemento clave del trabajo. Podrían haber sido dichos con los participantes de rodilla, mirando a la pared, como ocurre en Purgatory, también de Galante y Borralho, o de pie sobre una mesa, o simplemente de cara al público, lo que hubiera generado situaciones distintas. El susurro no convoca a una masa, invita a la proximidad, a unos pocos. Hace pensar en un ámbito de silencio y cercanía donde la sensación de intimidad se crea desde lo colectivo.

El hecho de que los intérpretes tengan los ojos cerrados contribuye a que el medio sensible cobre autonomía en tanto que espacio de susurros que vienen de ninguna parte y se dirigen también a ningún lugar, simplemente se producen ahí, en ese momento. El origen de los textos, como también su contenido, actúa como una referencia lejana frente a la ausencia de emoción en la dicción y el tono neutro y constante, que elimina la dimensión sicológica. Esto produce una extraña sensación de pérdida de identidad que hace que se imponga la percepción de los cuerpos como organismos susurrantes sin una subjetividad propia, pero sí con una textura, un tono de voz y una presencia singulares. Para conseguir esta dicción, se les dicta a los intérpretes los textos a través de unos auriculares. Esto hace que estos tengan que poner la atención en aquello que están oyendo y no en darles un colorido emocional. La interioridad a la que hace referencia la obra no descubre el interior de unos sujetos, sino de un paisaje humano que se ofrece a una percepción sensorial cercana y envolvente, que más que visual habría que definir como táctil. Como dirá más adelante Rodrigo García refiriéndose al uso de los textos, lo importante no es lo que se dice, sino la situación que se crea.